La foto durante la Copa del Mundo se ha convertido en un símbolo de unidad entre los pueblos ¿Una foto o mil palabras?
Durante un partido entre Senegal y Polonia, valedero para la primera ronda del Mundial de Rusia 2018, el fotógrafo paulista Rodrigo Villalba registró esta foto que se ha convertido en un símbolo de unidad entre pueblos y razas.
La imagen que muestra el brazo del senegalés Sadio Mané encontrándose con el del brasileño de origen polaco Thiago Cionek, en un fuerte apretón de manos, es el resultado de una idea que surgió en cuanto los jugadores saltaron al terreno de juego.
Foto: Rodrigo Villalba
"Me llamó la atención esta diferencia abismal en el tono de la piel, los polacos muy blancos y los senegaleses muy negros. Pensé que sólo el Mundial puede unir a estos dos pueblos tan distantes, con culturas, lenguas y costumbres tan distintas", declaró en una entrevista a Uol Esporte.
Equipado con una cámara Nikon D5 y un objetivo de 400 mm, Villalba se puso a esperar un momento que simbolizara la historia de la unión de los pueblos que le gustaría contar. Cuando el delantero Mané cayó al césped y Cionek extendió el brazo para levantarlo, Villalba apuntó su objetivo y esperó.
Ver también: La sensualidad artística y sin pretensiones de Mayara Ríos"Mané dudó en levantar el brazo", recuerda Villalba, "pero cuando por fin tocó la mano del polaco, hice el disparo. Me di cuenta en el acto de que tenía una gran imagen".
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